Uno de los factores más determinantes en la explosión de la burbuja inmobiliaria en 2008 fueron las llamadas “Obligaciones de Deuda Garantizada”, CDO por sus siglas en inglés.
La idea detrás de los CDO, es agrupar títulos de hipoteca o crediticios con distintas calificaciones de riesgo y que no han sido vendidos de manera individual. El procedimiento consiste en mezclar algunos activos subyacentes que se consideran “seguros” con otros menos propensos a ser pagados, empaquetándolos y vendiéndolos a los inversionistas. El inversor que decida comprar el CDO, soporta también el riesgo de crédito colateral. La estructura de los CDO, a grandes rasgos, se compone de tres tramos para clasificar a los activos subyacentes: Senior, (calificaciones AAA hasta A) Mezzanine (calificaciones BBB, pero no menor a B) y Equity. Aquellos que caen en la categoría de Senior reflejan la calidad del colateral, además de determinar cuánta protección tiene un tramo determinado con respecto a los demás. De presentarse una situación de insolvencia, el calendario de Senior tiene preferencia sobre las demás.
¿Por qué se crean los CDO? Mediante esta práctica es que se redistribuyen los riesgos de impago de los activos agrupados permitiendo así que los interesados escojan el riesgo que quieren asumir. De igual forma, hay que considerar que el efecto de la división de cartera, puesto que no es lo mismo invertir en un único préstamo que en una cartera de ellos.
Después de la crisis de 2008, los CDO perdieron la confianza de muchos inversionistas debido a las prácticas y mercado fraudulento que le dieron pie; sin embargo, en años recientes han comenzado a recobrar fuerza, sobre todo en el área de deudas corporativas. En el área de hipotecas aún existe mucha desconfianza debido a las pérdidas sufridas en tramos Senior, dudas sobre ratings y la complejidad del producto, de modo que a mediano plazo, no parece que este tipo de CDO recupere la confianza de los inversionistas.
Pablo Rafael Hernández Landeta
Director de Investigación de UNAM FCA
LinkedIn:
linkedin.com/in/rafael-landeta-150ba2173
Referencias:
Escudero, S. (2012). Descifrando los CDO. 7/Febrero/2019, de El País Sitio web:
https://cincodias.elpais.com/cincodias/2012/05/29/economia/1338404148_85021
5.html
García, P. (-). Collaterized Debt Obligation (CDO). 7/Febrero/2019, de Afi Sitio
web: http://www.afi.es/EO/CDOs.pdf
Comentários